Memorias de una geisha ~ Arthur Golden

Memoirs of a geisha · Arthur Golden
Autoconclusivo
RBA Coleccionables · 2007
414 páginas
ISBN 9789870407096

Poco antes de su muerte, Sayuri, una anciana japonesa afincada en Nueva York, cuenta la historia de su vida a un joven amigo americano. El poder de seducción de la voz narrativa de esta geisha legendaria transporta al lector a un Japón de entreguerras, lleno todavía de ecos feudales, y a una de las tradiciones japonesas que más curiosidad inspiran en el mundo occidental: la de la geisha, una peculiar práctica cultural a la que están ligadas artes tales como la seducción, la danza, la pintura o la clásica ceremonia del té.

En Memorias de una geisha entramos a un mundo donde las apariencias son de suma importancia, donde la virginidad de una niña es subastada al mejor postor, donde las mujeres son entrenadas para seducir a los hombres más poderosos y donde el amor es desdeñado como una mera ilusión. Es una obra de ficción única, romántica, erótica y de suspense absolutamente inolvidable.

Comentario personal

Esta clase de libro me hace dudar. ¿Por qué?, se preguntarán. Bueno, empieza con un prólogo que te pinta todo como si fuera una novela de no ficción. Pero de inmediato me digo, ‘vamos, no puede ser verdad… ¿O sí?’. Porque ya me ha pasado con otros libros y basta de ser tan ilusa.

Sayuri, la protagonista, hace su aparición cuando la historia lleva un tercio. En sus inicios, sólo es la pequeña Chiyo, una niña que es despojada de todo lo que conoce y abandonada en una okiya (una casa de geishas) porque su padre ya no puede hacerse cargo de ella. Esta situación me pareció muy cruel: no basta con que Chiyo pierda a su madre por una enfermedad, sino también a su padre y a su hermana. Sin embargo, ella no es una personita débil. En primera instancia lucha contra su destino; no acepta tan fácilmente su nueva vida. Es cuando una persona se cruza en su camino que se determina su futuro.

‘Memorias de una geisha’ intenta ser un fiel retrato de la vida de una geisha, producto de la investigación de Arthur Golden. Es difícil determinar qué es cierto, y qué cae dentro de la fantasía (sobre todo, teniendo en cuenta que Mineko Iwasaki, una de las geishas a las que entrevistó, desmintió varios puntos de la novela), sin embargo, en algo tiene mucha razón: la vida de estas mujeres era extremadamente dura. No sólo tenían que aprender diversas artes con el fin de entretener a sus clientes, sino que tenían que mantener una imagen perfecta, y muchas veces contraían deudas difíciles de cancelar. Por eso, a veces la lectura se hace cuesta arriba. Es difícil asimilar tanta atrocidad.

Sólo una parte de mí vivía en Gion; la otra vivía en los sueños de volver a casa. Por eso los sueños son tan peligrosos: abrasan como el fuego y a veces nos consumen completamente.

Sobre los personajes, ya mencionaba a la protagonista, Sayuri, quien tiene una personalidad aguerrida. Aunque se encuentra en un mundo desconocido, no se deja amedrentar por las dificultades. Una y otra vez la vemos a punto de fracasar, para luego levantarse con más fuerza con tal de cumplir su sueño.

Por otro lado, contamos con una serie de secundarios entrañables como Maheha, quien será la hermana mayor de la protagonista y la guiará hacia el éxito; Hatsumono, la villana del cuento, una mujer un tanto amargada y que recurrirá a bajezas con tal de conseguir lo que quiere; Calabaza, quien me puso en una encrucijada en un momento; Nobu, personaje complejo y que no merece lo que le pasó, y por último —y no menos importante—, el Presidente, quien es fundamental para el desarrollo de la historia.

Es complicado sentir odio visceral o sólo simpatía por cada uno de ellos. Golden los humaniza absolutamente, ninguno es completamente bueno ni malo. Quizá Hatsumono sea la más aborrecible, pero si lo pensamos bien, tiene sus razones para actuar como lo hace.

—[…] Si no pierdes de vista tu destino, todos los momentos de la vida se convierten en una oportunidad para aproximarte a él.

Ahora bien, aunque ‘Memorias de una geisha’ me gustó mucho, igualmente encontré algunos detalles que me frustraron por momentos. El primero es el uso de flashfowards a modo de información. Sayuri, como narradora, hace varios comentarios de acontecimientos futuros que despiertan curiosidad. Lamentablemente, son sólo a modo anecdótico, y jamás volvernos a cruzarnos con esos pasajes de su vida.

El otro punto tiene que ver con la línea temporal. Por momentos, me perdí, cronológicamente hablando. Sólo cuando un personaje mencionaba que habían transcurrido tantos años es que lograba situarme otra vez. En ocasiones, Sayuri tenía veinte años desde mi punto de vista, cuando en realidad pasaba de los treinta. Quizá esto tiene que ver con que, o el personaje maduró muy rápido, o jamás lo hace; se siente un poco plano en este aspecto.

El final me descolocó un poco. Creo que sigo procesándolo, porque toca ciertas fibras sensibles relacionadas con valores personales. En cualquier caso, es muy coherente, y cierra bastante bien la historia de Sayuri.

Conclusión

‘Memorias de una geisha’ es un libro crudo, ambientado en un mundo donde la mujer era vista como un adorno. Sin embargo, nuestra protagonista se reconstruye una y otra vez, y jamás se rinde. Su historia es un himno a la perseverancia, a los sueños y a la esperanza.

Sobre el autor

Arthur Golden nació en Chattanooga (Tennessee). Tras estudiar en Harvard, donde se especializó en Arte Japonés, pasó un tiempo en China y Japón. Cuando regresó a los Estados Unidos, continuó sus estudios en la Universidad de Boston. Vive en Brookline (Massachussets) con su esposa y sus dos hijos.

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