Molino · 2017
496 páginas
ISBN 9788427204393
Pasajera · Caminante
Voy a comenzar mi comentario con algo que tuve atragantado durante toda la lectura: me parece francamente imperdonable que un libro tenga 500 páginas y que el argumento progrese a paso de tortuga. Es decir, esas 500 páginas pudieron ser 200 sin lugar a dudas.
En una sola noche, Etta Spencer lo pierde todo. Arrastrada a un viaje en el tiempo, Etta deberá encontrar la forma de sobrevivir en un mundo extraño y peligroso. Nicholas Carter carga con un oscuro secreto que la aparición de Etta sacará a la luz. Nicholas deberá escoger entre su libertad o salvar la vida de la chica que viene de un futuro tan misterioso como codiciable. Perdidos en el espacio y el tiempo, Etta y Nicholas no tardarán en descubrir que solo se tienen el uno al otro. ¿Será suficiente para sobrevivir cuando la traición, las mentiras y el ansia de poder se interpongan en su camino?
Comentario personal
La historia de Pasajera es interesante, y me engañó entusiasmó el que incluyera viajes en el tiempo y una navegación en barco (soy fan de las historias ambientadas en medios de transporte). Lastimosamente, la autora poco y nada hace por mantener nuestro interés. Está demasiado embobada por el romance entre Etta y Nicholas (no es spoiler, lo dice la sinopsis), y cuando en realidad deberíamos estar recorriendo distintas épocas en una carrera contrarreloj para salvar a la madre de Etta, nos la pasamos presenciando las calenturas de estos dos tórtolos que se han enamorado en ¿qué? ¿Tres días?
No sólo el romance me pareció exagerado, también hallé demasiados paralelismos con la trilogía El amor más allá del tiempo de Kerstin Gier. Por supuesto, eso sólo consiguió que mi lectura se entrampara todavía más, pues no hay nada peor que sentir que vivimos en un continuo déjà vu.
Todos los personajes se sienten irreales, son más bien caricaturas, absolutamente mal dibujados y tan profundos como un charco. No pude conectar con ninguno. Además, cabría esperar grandes cosas de los villanos de turno, pero no, no son más que personajes sin nombre que aparecen en las sombras y amenazan a nuestros protagonistas de vez en cuando.
Bracken tiene una pluma magistral, muy evocativa, no obstante, la gasta y desgasta en cosas innecesarias. Tanta retórica no ayuda a construir la acción ni a que la historia progrese, y menos suscita el interés del lector por saber qué ocurrirá después. Por momentos pasaba páginas y páginas y me preguntaba hacia dónde nos dirigíamos. ¿Dónde estaba la premura del inicio? ¿La sorpresa y el miedo que Etta debería sentir por lo desconocido? ¿La emoción por ser capaz de visitar distintas épocas y lugares?
Creo que lo único destacable es el background de Nicholas, pero me hubiese gustado que la autora le sacara más lustre y, quizá, haber contrastado más su forma de ver el mundo con la de Etta, una chica de nuestro tiempo. También destacaría a Sophia y Rose, quienes con su agenda propia proporcionan momentos interesantes dentro de la bucólica historia de los dos tortolitos.
En resumen, aunque me había puesto la meta de terminar todas la sagas que comenzara, me estoy planteando firmemente no leer el segundo y último libro. Tengo miedo que me arroje a un parón lector de proporciones. ¡Tardé tres meses y medio en leer este!
No me sonaba pero por lo que cuentas, lo dejo pasar, que no me llama nada.
ResponderEliminarBesotes!!!
¡Hola! :)
ResponderEliminar¡Tres meses y medio! ¡¡500 páginas!! Pobre, hasta a mí me ha dado toda la pereza tan solo imaginarme como habría sido la lectura de este libro según mencionas, lamento que hayas tenido que pasar por eso jajaja. Desde que dijiste que se centra demasiado en el romance entre estos dos personajes en vez de en la carrera a contrarreloj ya este libro me perdió, así que creo que haré mejor centrándome en otros libros por el momento :') ¡Gracias por la reseña! Y espero que tu siguiente lectura sea mejor, ya estoy viendo que te estás leyendo Sombras de identidad así que espero que te ayude a no entrar en un parón lector jajaja.
¡Nos leemos! ^^